La
posesión de Escañuela. El cabildo Catedralicio. Documentos.
Continuamos
avanzando en el tiempo, seguimos en el siglo XIV y
en las siguientes líneas vamos a tratar la posesión de
Escañuela.
Como
vimos en el artículo anterior, es probable que a principios
del siglo XIV fuese una aldea
perteneciente al concejo de Arjona aunque, como se dijo, no
se dispone hasta el momento de ninguna prueba documental que
nos lleve a poder afirmarlo con certeza. Lo
que sí se puede decir con total seguridad, a tenor de los
documentos localizados, es que a finales
de la centuria, concretamente en 1385, la villa
de Escañuela aparece como cabeza de un señorío, cuyo titular es sobradamente conocido, D. Pedro Ruíz de Torres,
el primero de esta familia que ostenta el título de Señor de Escañuela.
La concesión debió efectuarse unos años antes aunque se desconoce la
fecha exacta en que se produjo. A este Pedro Ruiz de Torrres le
dedicaremos la oportuna atención en su momento, ya que hoy
trataremos de otro propietario muy importante de las tierras y bienes del pueblo; el Cabildo Catedralicio que se proclamaba por entonces dueño
de “la mitad” de Escañuela y que prolongaría su titularidad a
lo largo del tiempo.
¿De
dónde provenían las propiedades de la Iglesia?
Dos
donaciones de bienes en Escañuela a favor del Cabildo Catedralicio.
Ya vimos la evolución seguida por la diócesis
de Baeza-Jaén tras la conquista del territorio por Fernando
III el Santo. Desde entonces se produce un proceso de ampliación del
patrimonio en la citada diócesis por la acumulación
progresiva de bienes de variada naturaleza conseguidos a través de
diferentes cauces como donaciones, compras e intercambios. A través de las donaciones, el Cabildo fue
destinatario de un amplio volumen de pertenencias procedentes de distintos donantes; la corona,
eclesiásticos y particulares. Y éste es precisamente el caso de Escañuela.
Primera
donación.
En
la primera mitad del siglo XIV, en el año 1346, el 30
de enero, probablemente varios años antes de que la
villa fuese concedida en señorío a don Pedro Ruíz de Torres, don Juan Pérez de Saavedra,
obispo de Córdoba (c1336 hasta 1346) hace una donación
al Cabildo Catedralicio de Jaén de: "huerta en Valparayso; bueyes,
viñas, ejidos, prados y dehesa en Escañuela, heredamiento
de tierra y solares en Villardompardo; viña y olivar en
Torredelcampo; casas, 2 hazas de riego y mitad de una viña en Jaén”. Esta donación la hace el obispo para la fundación
de dos capellanías1 y se
puede consultar en el documento depositado en el Archivo de la
Catedral de Jaén2.
Segunda
donación.
Se realiza varios años
después y hay que citarla aquí para poderla relacionar con la anterior y
establecer con ello la procedencia de los bienes del Cabildo en el
término de Escañuela, localizados hasta el
momento.
En
el último cuarto del siglo, el 2 de abril de 1387, otro obispo de
Córdoba, llamado también don Juan pero
éste apellidado Fernández
Pantoja (1379,1397) donó al Cabildo:“heredades
en Escañuela,
Villardompardo,Torrecampo y Valparaiso”. El documento se encuentra también custodiado en el Archivo de la
Catedral de Jaén3.
Estos
documentos nos ofrecen información acerca
de la naturaleza y composición de los bienes legados, el tipo y las características de las tierras y los cultivos que podían encontrarse
en el término de Escañuela así como la referencia a que la
Iglesia de Córdoba era la titular de estas posesiones.
El Cabildo pues llego a ser propietario de un importante espacio patrimonial en el término de Escañuela y sus alrededores, y su titularidad se prolongó por un amplio periodo de tiempo. Las
donaciones referidas, que incluyen alguna compra desde el último cuarto de siglo del XV
hasta el primero del XVI, llevó a que el propio Cabildo pusiese en
arriendo “la mitad de Escañuela” y por ello recibiese las
oportunas rentas4.
Mencionábamos
al principio que durante el siglo XIV, el término de Escañuela contaba con al menos dos
grandes propietarios; la casa de los Torres y el Cabildo Catedralicio.
Esta situación da lugar a un hecho que aparece reiteradamente
mencionado en las distintas fuentes, y que no es otro que la
rivalidad y los desacuerdos que esta doble titularidad en la
posesión de Escañuela produjo entre ambos estamentos y que les llevó a dirimir sus diferencias ante la justicia. A este
respecto el episodio más conocido es el pleito disputado en 1497 entre el Cabildo de la Catedral de Jaén y Doña teresa de Torres, esposa del condestable de Castilla don Lucas de Iranzo y señora de
Escañuela.
Todo esto se explicará más adelante pero en el siglo XIV es la figura de don Pedro Ruíz de Torres y la creación del mayorazgo, de
singular importancia para la historia de Escañuela, lo que será analizado profusamente en el próximo
artículo.
Beatriz Pedrosa.
1 Las
capellanías eran obras pías, a través de las cuales, el fundador
dejaba señalado en su testamento una determinada cantidad de bienes que generalmente era puesta en renta de manera que los
beneficios generados se dedicaran a misas por el sufragio del alma del donante.
2 Archivo
de la Catedral de Jaén. Gav.1 nº 53 (D. 50).
3 Archivo
de la Catedral de Jaén. Índice 2º, nº 53.
4 Archivo
de la Catedral de Jaén. (Sala Capitular) D. 6 a. Mismo
archivo: R-1512. Fol. 35 v-39 v (D. 42 a) y R-1512. Fol. 46 r-
524 (D. 42 a)